Es posible que en la pareja haya cambios después de cierto tiempo juntos, si comienza a ver algunas señales de que tu pareja te odia pero no te deja, por lo general, es porque se está perdiendo el amor que se tienen, y están entrando de manera inmediata en un punto totalmente muerto.

Encontrar Señales de que mi pareja me odia pero no me deja es un indicio de que la relación esta estancada

Es común que suceda encontrar estas señales, sobre todo en parejas donde se haya roto la confianza y el amor se esté acabando.

La mayoría de los casos, se ve solo en una sola persona de la pareja, ya que la misma quizás por temor no quiere ponerle un punto y fin a la relación. Es en ese momento donde el otro que se ve afectado comienza evidenciar la sensación de odio que pueda existir.

Señales de que mi pareja me odia pero no me deja a las que debes prestar atención

Después de un tiempo, las relaciones de pareja se convierten en algo monótono y es el aburrimiento lo que hace que las mismas se terminen, generalmente causado por diferentes factores como lo es el uso excesivo del teléfono, las amistades dañinas o incluso la cizaña de la misma familia.

Veamos señales de que mi pareja me odia pero no me deja:

1.Falta de comunicación

La falta de comunicación es una de las señales principales que comienzan a aparecer en las relaciones cuando se comienzan a odiar y dejar de amar.

Es en ese instante donde todo lo que se pudo haber construido se comienza a desvanecer

Es importante resaltar, que la base para que una relación funcione debe ser la comunicación, poder hacerle sentir al otro lo que se siente y lo que no te gusta y también las inquietudes. Pero, si esto no sucede, quiere decir que ya está comenzando a sentir una señal de odio.

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Trata de evitar esto lo más que puedas en tu relación para no caer en controversia

2. Distanciamiento

Por lo general, cuando en una relación existe el odio comienza a aparecer el distanciamiento progresivo y a evadir uno al otro en ciertas ocasiones.

Esto quizás suceda por el temor a no querer decir nada e irse más bien distanciando sin lastimar más de la cuenta.

Esta señal, si la lees con detenimiento, te puede ayudar a entender que va muy de la mano con la falta de comunicación y que es ésta la que lleva poco a poco a recurrir al distanciamiento como tal.

Si no existe una interacción constante con la pareja, podría ser una clave para comprender por qué mi pareja me odia pero no me deja.

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El distanciamiento es algo así como si estuvieses con alguien, pero al mismo tiempo no

3. Conflictos constantes

Cuando en una relación comienzan a aparecer los conflictos, ya es una señal de que están cayendo en el odio y en el rencor debido a que comienza a aparecer la falta de respeto, y una infinidad de cosas que conllevan a la pareja a odiarse mutuamente o quizás uno más que el otro.

Esto sucede generalmente porque la pareja no consigue como ponerle fin a la relación

A muchos les parece más fácil crear un conflicto, quizás hasta por cosas innecesarias y que en el momento no tengan ningún sentido, solamente buscando la manera de que se canse uno del otro.

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Un punto para llegar a la monotonía, y de echarle la culpa al otro

4. Disminución de la confianza

La confianza en toda relación debería ser el elemento principal que permanezca en la misma, ya que esto es lo que permite que el vínculo se fortalezca y puedan superar cualquier tipo de adversidad que se les pueda presentar a lo largo del tiempo que deseen estar juntos.

Cuando sientes que tu pareja comienza a disminuir el grado de confianza debes de comenzar a preocuparte.

Es en ese preciso momento donde comienza a faltar el amor y al mismo tiempo conlleva al distanciamiento que por lo general se hace sin ningún tipo de explicación.

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Si este es tu caso recurre a tiempo a emplear la comunicación para no pasar a cosas mayores

5. Exceso de planes sin ti

Al hablar de exceso de planes, se refiere a citas y agendas llenas de actividades por fuera de la relación, es decir que tu pareja comienza a realizar de manera individual planes que no te incluyen a ti.

Planifica actividades sin importar lo que la otra persona pueda pensar o sentir

¡Esto debe preocuparte! Cuando tu pareja comienza a llegar tarde, y las veces que llega más temprano viene con algún plan que no te incluye, alerta.

Cuando mi pareja me odia pero no me deja, es común que empiece a poner a todos sobre ti, considerará más importante otros planes que pasar tiempo juntos.

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No permitas que tu pareja sea evitativa y afróntala para aclarar los inconvenientes que puedan tener.

6. Ausencia de momentos íntimos

Cuando se trata de una relación de parejas, debes siempre tener en cuenta el encuentro de momentos íntimos.

Esto es lo que les ayudará a que se mantengan estables y sobre todo que el amor pueda prevalecer sobre cualquier otra cosa o un obstáculo.

La falta de intimidad es una señal muy importante.

La ausencia de momentos íntimos comienza a florecer cuando uno comienza a buscar al otro, pero resulta ignorado.

Si te evade, de tal manera de no tener algún encuentro romántico, te llevará a asegurar el pensamiento de que ya no se encuentra disponible para ti.

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Busca siempre tener un momento especial con tu pareja para que por esto no caiga en odio

7. Maltratos

Si a tu pareja todo lo que haces le parece que mal, te maltrata y te critica, así como sufres abusos emocionales, es una señal clave que la pareja se ha estancado.

¿Por qué a pesar del odio no te deja?

Una pregunta realmente significativa por la que muchas mujeres se enfrentan a diario, ¿por qué no me deja si me odia?

Cuando en una relación comienzan a aparecer señales de que te odia o no te ama, ya esto es un indicio de que el amor se está convirtiendo en odio, pero quizás por miedo está evadiendo dejarte. Por eso es importante que conozcas cuáles son esos motivos y qué hacer.

1. Miedo a la soledad

La soledad es la enemiga de todo ser humano y es por eso que, la mayoría de las personas le temen.

Se convierte en una enfermedad conllevando así a otras circunstancias como lo son los estados de depresión que pueden ir mucho allá de esto, causando hasta un suicidio.

Cuando se habla de una relación de pareja en la que el amor se suplanta por odio y aun así no se dejan, pasa por el miedo a la soledad.

El causante del daño sigue aferrado aun sabiendo lo que está pasando con la otra persona buscando fingir que todo está bien, pero demostrando lo contrario con sus actos; por eso surgirá la duda si mi pareja me odia pero no me deja.

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Lo más aconsejable es que sueltes ese miedo y dejes ir lo que no te hace bien

2. Convivencia

Cuando surge el motivo de la convivencia muchos se preguntarán ¿por qué sucede esto?

La respuesta es sencilla, debido a que cuando en el hogar todo funciona de maravilla y ambos se ayudan en dichos oficios es algo se envidiar y que no se encuentra en cualquier lugar.

Quizás pueda pasar que la convivencia contigo es muy fácil y ambos se complementan al momento de realizar las labores del hogar y, como es muy lógico, prefiere tener odio antes de dejar a una persona de este tipo que por lo general no se encuentra en cualquier esquina.

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Evita convertirte en un compañero de oficio y no en su pareja

3. Zona de confort

La zona de confort entra también en esta lista donde de seguro se odian en la relación, pero no se dejan por el simple de hecho de supuestamente sentirse cómodos por diferentes razones y obviando el problema por unos instantes solo por el conformismo.

Esto sucede generalmente cuando la relación de pareja se comienza a tornar totalmente monótona y rutinaria.

A pesar de existir ese grado de rencor, no se dejan debido a lo rutinario confortante que por el otro pueda llegar ser

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Este es un motivo que debes evitar de quedarte anclado al otro solo por la zona de confort, sobre todo sabiendo que mi pareja me odia pero no me deja

4. Miedo a hacerte daño

Cuando se trata de este motivo hay que ser muy cuidadosos al momento de juzgar, ya que si lo ves desde un punto de vista sentimental podrías decir que está bien. Pero en cambio, si le das una perspectiva con un con poco de malicia, podrías darte cuenta que en realidad no es tan bueno como parece.

Es obvio que cuando ya no exista el amor y comienza a pernotar el odio, sea difícil entender que no te deje por miedo a hacerte daño.

A pesar que ya lo ha causado, esta persona piensa que al dejarte te herirá aun más y por eso no se atreve a separarse.

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Esto puede hacer que no se vea con fuerzas para poder dejarte o decirte adiós

5.  Miedo al qué dirán

Hoy en día, en la sociedad en la que se vive, es muy frecuente ver cómo el ser humano se ha encargado de vivir con el miedo al qué dirán y han dejado de hacer cosas importantes.

Muchas veces se tiene miedo de tomar decisiones por lo que puedan decir los demás

Puede ser que como pareja se lleven muy bien ante el entorno que conviven, pero resulta que en el hogar sean otra cosa.

Podría llegar a existir este tipo de miedo con tan solo pensar que, ante la sociedad fingen amarse, pero en casa se odien. Quizás sea este el dilema que le impida finalizar la relación.

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Se autónomo de tus pensamientos y decisiones

6. Quizás no quiere dejarte

A pesar de las señales, puede ser que tu pareja este enojada, o frustrada contigo, o con la relación y que a pesar de todo te ame.

Esto se da cuento la persona no tiene los recursos para expresar su frustración y enojo, o muy posiblemente se siente dolida.

¿Qué hacer cuando mi pareja me odia pero no me deja?

Cuando se está pasando por este tipo de situaciones, siempre habrá la incógnita de qué es lo mejor que se debe hacer.

Se dice que el odio es amor estancado.

Por eso, para que sea algo sano y evitar hacerse más daño, es importante que pongas en práctica lo siguientes consejos que de seguro te servirán de mucho.

Hablar con la pareja

Esto quizás sea un poco engorroso para aquellas parejas donde la comunicación se torna difícil, pero lo que debes hacer es afrontar el obstáculo y ser estratégico.

Deberás encontrar la forma, de manera tal manera que puedan hablar y descubrir lo que realmente pasa.

La mayoría de los conflictos de pareja son problemas de comunicación

Al lograr este paso podrán llegar a un acuerdo y así poder ver si se separarán que, por lo general, es lo más sano.

Si existe la posibilidad de poder resolver el problema, continuar o simplemente darse un tiempo que a lo mejor también lo necesiten.

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Lo ideal es usar técnicas y palabras correctas para resolver

Tomar decisiones

La toma de decisiones es algo sumamente importante sobre todo en una relación, y en este caso, cuando comience a aparecer el odio es importante que la persona que se encuentre afectada al momento, pueda tener la iniciativa para ver cómo van hacer y ponerle fin a todo.

¿Es mejor terminar la pareja o intentar resolver el conflicto?

Siempre debe ser la persona afectada que, por lo general, se atreva a tomar la decisión.

Ésta persona tomará la decisión al sentirse incapaz de poder soportar un minuto más este tipo de relación, llena de odio que perjudicar y causa heridas graves.

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Mereces a alguien que te quiera y te amé a tu lado y que sea capaz de afrontar las realidades

Valorarte

Esto es algo que debes tener siempre en cuenta, ya que si no te valoras resulta bien difícil ponerle fin a este tipo de relaciones.

Por eso, lo mejor que puedes hacer es verte por dentro, escucharte y conocer realmente el valor que tienes y que no se compara con ningún otro.

Pregúntate siempre si mereces estar con un tipo de persona que te lastime con su odio

No estés ni un minuto más con alguien que cause miles de inseguridades en ti y, sobre todo, heridas profundas que quizás al momento no las notes pero que después de un tiempo comiencen a flotar.

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Date el puesto justo y necesario que realmente sea para ti

Debes considerar que cuando en las relaciones el amor pasa al odio, es una señal de que debes dar por terminado. Casi nunca se logran subsanar estas heridas que son tan profundas, pero que se pueden evitar hablando a tiempo sobre todo con comunicación.

Cuando tu pareja te odia pero aún sigue contigo lo mejor que puedes hacer es valorarte y tomar decisiones

Mereces tener a alguien a tu lado que te valore y te ame, que contribuya con tu crecimiento como persona. Jamás estés con alguien que solo reste a tu vida, cuídate de estas personas.

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